El Consell de Valencia no contempla la realidad de las empresas alquiladoras e impone unas cuotas obligatorias a los vehículos libre de emisiones.
Estamos en una transición ecológica hacia una movilidad sostenible, esto sumado al cambio tecnológico que está sufriendo el mercado de la automoción y el desabastecimiento de automóviles sumado el elevado precio de los nuevos vehículos, esto ha provocado la desconformidad por parte de las empresas de alquiler hacia este nuevo impuesto que se les va imponer. Las empresas del “rent a car” ha enviado una carta abierta al presidente de la Generalitat, Ximo Puig, donde se le comunica una crítica hacia este nuevo impuesto para los vehículos libres de emisiones.
La futura normativa informa que se establecerá unas cuotas obligatorias para las flotas de alquiler de vehículos libres de emisiones a lo que también afectará al resto de vehículos de las mismas condiciones, lo que implicará un incremento en los precios para poder adquirir un vehículo de alquiler. Lo que causara un efecto frontera y se distorsionara el mercado ya que al elevar el impuesto de CO2 respecto a las comunidades autonómicas cercanas creara un conflicto de precios y una pérdida de turismo local.
Según FENEVAL, “el vehículo de alquiler emite 14grs/km CO2 menos que el vehículo promedio del parque español”. “Resulta sorprendente que el sector menos contaminante y que representa solo el 2,7% del parque automovilístico sea el que se ve sometido a una norma que fija unas cuotas obligatorias de vehículos libres de emisiones sin ningún estudio que la acompañe”, indica en la carta. “Nuestra flota es la menos contaminante de todos los sectores de la automoción, pues tiene una alta tasa de renovación, con una antigüedad media de entre 6 meses y dos años, cuando el resto de los vehículos que circula por las carreteras valencianas es de más de 13 años”. El texto ha sido firmado por FENEVAL (Federación Nacional Empresarial de Alquiler de Vehículos con y sin Conductor, Acoford (Asociación Nacional de Concesionarios de Ford España), Aecoval, AER, Anfac, Ceav, Exceltur, Faconauto, Ganvam, Hosbec y la CEV.
Aunque la ley no se aplique hasta 2025 ya está aprobada, se solicitan que se retrase la aprobación de esta medida debido a que no existe un pertinente análisis técnico y/o ambiental que lo justifique cómo contribuyen a la sostenibilidad medioambiental tanto los porcentajes establecidos de vehículos eléctricos para las flotas del rent a car como el nuevo impuesto a las emisiones de los vehículos
Por este motivo se envió esta carta para poder corregir la situación y encontrar otra forma de aplicarla ya sea de una forma escalonada para que no repercute de una forma directa al precio y calidad de servicio.
No hay que olvidar que en Valencia se creará en 2023 la ZBE (Zona de Bajas Emisiones) que estará compuesta por 274 cámaras y 93 puntos de control que registrarán las infracciones a lo largo del día hacia los coches que no tengan permitido el acceso por ser contaminantes, la falta de nuevas vías disuasorias que recorten o faciliten la movilidad, agrava la situación contaminante puesto que se genera embudos que afectará al trafico emitiendo más CO2 de lo debido.
Además, hay que tener en cuenta que todavía no hay una gran infraestructura en cuanto a cargadores eléctricos, sin duda estas normas que se van a emplear carecen de una rigurosa técnica y trabajo, puesto que tan solo buscan una acción populista, hay que añadir que los turistas se pensarían varias veces si es conveniente para ellos el vehículo eléctrico lo que causaría el estacionamiento a largo plazo de estos vehículos lo que aumentaría la antigüedad del parque móvil y afectaría a la renovación de la flota que a su vez perjudicaría al mercado de vehículos de ocasión.
Esta es una publicación del Grupo Baysan.